El Valencia continua en la copa a pesar de perder en el Calderón
No podía ser de otro modo, el equipo de Koeman no podía dar crédito cuando en los primeros compases del encuentro, en un suspiro y con dos errores infantiles (a los que nos hemos acostumbrado en los últimos tiempos) veía esfumarse la ventaja de un gol que tanto costó conseguir en la ida en Mestalla.
Los che lo intentaban, pero este equipo no tiene identidad y así es muy dificil creer en algo más que milagros. Y el milagro se dió, cleber se propuso devolver la esperanza a los del Turia y marcó en propia puerta un gol que supo a gloria.En ese mismo instante el Valencia comienzó a creer, si bien no en si mismo, si lo hizo en los defectos del At de Madrid, que son muchos. Se creció y apenas en un suspiro, el chaval Mata los Mató. Golazo del chaval que destrozó todos los planes del Mexicano Aguirre y que instauró el más absoluto silencio en el Calderón.
Era el 2-2 y las semifinales estaban casi en el bolsillo, todo ello sin haber consumido siquiera la primera mitad.Así y con algunos apuros defensivos, más por desajustes propios que por meritos colchoneros, se llegó al descanso con la intención de reajustar las lineas y conservar la ventaja en la segunda mitad.La segunda parte comenzó con dudas, no esta el Valencia para hacer derroches, pero poco a poco y a base de sacrificio y ganas se fue asentando sobre el cesped y a confiar en si mismo. Pero todo es endeble en este Valencia y a la menor concesión Forlan estrelló el esférico en el poste (ese gran amigo de Timo Hildebrand) y por un instante todo pareció resquebrajarse. Apenas habían transcurrido 8 minutos de la segunda mitad.
El Atlético de Madrid es un equipo bronco y duro cuando las cosas no funcionan acorde a sus intereses, en apenas 50 minutos su defensa al completo se cargaba de amarillas y el riesgo de expulsión animaba aún más a los che a empujar. Una falta peligrosa, una expulsión, cualquier detalle podía servir para sentenciar. pero el los de Koeman se empeñan en jugar con el corazón de los aficionados e Hildebrant volvió a Cantar. Gol de Varela y de nuevo a sufrir. Mas de uno se acordó de Cañizares.
El At. de Madrid se crecía , de nuevo el muerto parecía revivir, el vivo parecía morir, pero en estas partidos locos todo se puede esperar. Pasaban los minutos, los banquillos se movían, Villa lo intentaba una y otra vez pero demostraba estar lejos de su mejor momento.Había pasado demasiado tiempo desde la última vez que se marcaron dos goles y los murciélagos no estaban dispuestos a perder tan preciado botín. El Valencia volvía a dominar.Los latigazos de Forlan, las diabluras del Kun eran contestadas por la profundidad de Joaquin y la insistencia de Villa.
Se consumían los últimos minutos, se consumaba una derrota más de los Valencianos, pero al mismo tiempo y gracias al gol del partido de ida, se consumaba el milagro y los Che se plantaban en la semifinal.A partir de ahí a reparar las averías defensivas, el desorden táctico, los continuos desaciertos en los cambios..., a recuperar la psicología del grupo y a sacar del once a Edu y a premiar a Mata con una nueva oportunidad. Hoy la derrota fue suficiente, pero el domingo no vale perder.
0 Tu comentario:
Publicar un comentario