Tengo una corazonada

Tengo una corazonada es el lema de algo que no sucederá jamás, los JJOO de Madrid 2016, un lema que sirvió para hacer creer a los no creyentes, o al menos intentar hacerles creer. Pues bien, yo también tengo una corazonada, aunque esta la tenemos muchos valencianistas.

Mi corazonada me dice que Unai la va a liar en el Sardinero. Si, ya sé que decir que la va a liar resulta bastante ambiguo, pero si eres ché ya sabrás que Unai solo la puede liar para ponernos de los nervios.

Unai fue quien defendió la permanencia de Banega en el equipo, contra corriente, el entrenador vasco acertó en su decisión, así lo está demostrando Banega en cada una de sus actuaciones.

Sin embargo, Unai tiene una extraña tendencia a la autodestrucción, cuando algo funciona lo cambia hasta que deja de funcionar, eso es lo que pasó ante el At de Madrid cuando sustituyó a Ever y eso parece ser que se repetirá, esta vez de inicio, en el Sardinero.

Marchena y Albelda pueden ser la pareja de pivotes del equipo, si eso sucede se estará renunciando a la posesión, al dominio y al control del balón, consecuentemente el equipo se verá abocado a jugar al contragolpe, algo que contradice las palabras del propio Unai que afirma que la filosofia de este equipo es atacar.

Atacar no es contratacar, por si a Unai no le ha quedado claro. No es que a mí me mioleste que se juegue al contragolpe, me molesta que nos tomen por tontos. Pero no quiero desviarme del tema, como iba diciendo, el doble pivote con Marchena y Albelda relegará a Ever al banquillo y si eso sucede, mucho me temo que la maldición del Sardinero continuará a no ser que el guaje salga de nuevo en auxilio del entrenador.
Tengo una corazonada, pero ójala ocurra como con Madrid 2016 y no esta se cumpla jamás