El Hércules intentará, al igual que lo hizo ayer el Levante en el Madrigal, dar la sorpresa y ganar en Mestalla. Los números de los alicantinos léjos de su estadio dejan mucho que desear; es en los puntos logrados en su estadio en lo que están basando sus esperanzas de mantenerse en primera división. Además, el affaire Drenthe, al que el entrenador parece haber perdonado, tampoco a ayudado en exceso a que el equipo obtuviese los resultados deseados.
Pero hay que ser precavidos. Valencia hace mucho que no despliega buen juego y en su estadio ha protagonizado más de una noche para olvidar. Sin ir más léjos, todos tenemos en la retina el último encuentro ante el Málaga en el que el VCF logró una sufrida victoria (4-3), sobre la campana, y con un equipo malacitano que disputó toda la segunda mitad con nueve jugadores.
La llegada de Jonas, el affaire de Miguel con la justicia de su país, el interés del Liverpool por Paco Alcacer, son temas a los que Unai debería prestar la atención necesaria para que el grupo no se despiste y el equipo salte al terreno de juego concentrado en la obtención de la victoria. Una victoria que, hoy más que nunca, se antoja importantísima.
La buena actuación del chori Dominguez, la pasada semana, puede servirle para que siga sumando minutos. Otra de las novedades es la inclusión de Jonas en la lista de convocados. Aunque parece poco probable que el brasileño debute esta noche, si el partido se pone de cara, no se descarta que Unai le de algunos minutos para que reciba el favor del público de Mestalla.
Pronto llegará la champions league, el calendario dejará de ser benévolo para el Valencia que tendrá que enfrentarse a equipos de la parte alta de la tabla, razón por la cual, abrir una brecha importante con los de atrás puede ser clave para que el enfrentamiento con el Shalke se pueda afrontar al 100%.
Por todas estas razones hoy solo vale ganar, independientemente de que Mata continue lesionado, por encima de que Topal haya desaparecido por completo de los planes de Unai o de si se juega con dos pivotes defensivos u ofensivos. Todas éstas son batallas que quedan atrás, el entrenador no va a cambiar ahora y dado que parece que lo del buen juego es una utopía, solo queda exigirles la victoria.
Aun no he visto la convocatoria para el partido, pero juegue quien juegue creo que hoy es el día clave en el que no se puede fallar más y donde los jugadores tienen que demostrar que realmente quieren estar lo más arriba posible (tercero)y ir dejando hueco con los de atras
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