Ganar es el leitmotiv del fútbol, aunque a algunos les cueste aceptarlo

Para que ser hipócritas. Desde que, hace 17 años, la afición del Depor instauró el tongo como forma correcta de comportamiento, estaba esperando este momento. El Depor ha descendido y para más Inri, a manos del Valencia. He de decir que aquel fatídico partido lo vi a escasos dos metros de Gónzalez, a pie de campo, justo en la valla publicitaria que se ve caer al suelo en el momento en que Gónzalez hizo lo que debe hacer todo profesional que se precie, defender su portería.

Aquella noche el Deportivismo perdió la liga, que ganó el FC Barcelona y el fútbol español perdió la honradez de forma pública. Los valencianistas hemos soportado durante 17 años que nos digan que lo justo era que Gónzalez se dejase marcar, es decir, aceptar el tongo era lo correcto y pelear por ganar lo prohibido. Que perversión.

Se ha insultado, humillado al valencianismo desde muchos frentes y durante largas temporadas por aquel hecho. El Valencia quedó como pesetero por no aceptar el soborno moral del Depor; se han acuñado miles de billetes que durante años, cada vez que el equipo che ha visitado Riazor, han llovido desde la grada recordándoles que lo justo es dejarse ganar, porque intentar conseguir la victoria es de malas personas. Por qué razón se insiste en que Gónzalez debió dejar entrar aquel balón. ¿Por simpatía, por dinero?. Que alguien de, de una vez por todas una razón que nos convenzca de que lo correcto era dejarse ganar.

Pues bien, ahí lo tienen, que recojan ahora todos esos billetes porque les van a hacer falta para volver a primera división. Anoche el Valencia les ganó al ralentí, sin querer hacer sangre, pero les ganó porque es infinitamente superior, por eso han descendido. Como hace 17 años, Gonzalez fue mejor que Djukic porque le paró el penalti y, porque no decirlo, infinitamente mejor que Djalminha que se escondió casi, casi detras el banquillo de Arsenio Iglesias.

Se acusa al Valencia de que recibió una prima del Fc Barcelona para que plantase cara al Depor. Puede que fuese así, pero en todo caso hay dos cuestiones irrefutables: la primera es que no es lo mismo recibir un premio por hacer tu trabajo que recibirlo por dejar de hacerlo y la segunda es que, por mucha prima que el Valencia tuviese, el Depor tenía la mayor motivación que puede tener un equipo, ganar la liga por primera vez en su historia. Su fracaso fue solo suyo, por mucho que lo hayan querido esconder durante casi dos décadas.

Puede que dentro de un tiempo se den cuenta del error que entonces cometieron, y que durante 17 años prolongaro,n al culpar al Valencia de sus propios males. Tal vez ahora hayan entendido que cada uno debe hacer sus deberes, porque lo que si que fue un escándalo es que el Valencia descendiese a segunda porque Betis y Cádiz pactasen no ganar. Intentar ganar no es un delito, pactar no hacerlo si que lo es. Por si a alguien le quedaban dudas.

Buena suerte en la liga Adelante.

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