Juan Mata en el acto de su renovación de contrato. Firmó hasta 2014
Hace unos días os comenté que la prensa oficialista se había puesto manos a la obra. Facilitarle el camino a Llorente parece ser el objetivo prioritario de algunos jefes de redacción "valencianistas". Primero había que venderle al aficionado que pueden llegar jugadores de alto nivel. El nombre de Gameiro está apareciendo hasta en la sopa. Pero no bastaba, había que dejar caer más nombres, el de chori Castro es ideal; el del Mallorca nos hizo un roto y la afición recuerda esas cosas. ¿Recordais a Tchité?, claro que sí. Tal vez seamos de los pocos que después de años recordemos al ex del Racing, pero un hattrick en Mestalla le valió para pasar a subconsicente colectivo valencianista. Nos lo podrían haber encasquetado por 20 kilos y nadie hubiese dicho nada.
El caso es que ya se ha completado la primera fase, la de hacernos creer que llegarán jugadores de calidad para cubrir posiciones que no son de alta prioridad. Como os dije
hace unos días, los anestesistas de opinión estaban allananando el camino para la salida de Juan Mata. Concienciado de que que llegarán grandes nombres, el aficionado valencianista soportará mejor la salida del burgalés.
Fase dos: concienciar de lo irremediable de la marcha de Mata
La estrategia ha dado sus frutos. Gameiro no juega en la posición de Mata, pero poco importa. Ya han conseguido que en el imaginario valenciansta esté grabado el nombre del jugador del Lorient. Puede comenzar la segunda fase.
Esta fase pasa por insistir en la necesidad económica que tiene el club, en que es necesario hacer caja y reducir el precio de la plantilla. Además, comienzan a salir nombres de grandes clubs y cifras respetables para que el aficionado madure la idea de la irremediable salida de Juan Mata.
Hoy es el City quien supuestamente se llevará a Mata. La idea de reunir en un mismo club a Silva y a Mata da credibilidad a la noticia. Además deberemos ser comprensivos, así Silva no se sentirá tan solo. A cambio, 26 millones de euros. La fase dos está en marcha, por si falla la estrategia del City, ya tienen preparada la del Liverpool. No hay nada que hacer, el paripé de la renovación de Mata era para esto, para facilitarle la salida en verano. El equipo competitivo del futuro pasa por no tener ni un solo campeón del mundo en nuestras filas. El elegido es Mata y los redactores de turno siguen haciéndole el trabajo sucio al presidente.
Después nos enteraremos de que no puede ser el chori Castro el sustituto de Mata, nos dirán que Jordi Alba puede cubrir su baja y Joaquín o Pablo también pueden actuar en dicha posición; nos harán entender que hay que reforzar otras posiciones (como si ahora no lo supiesemos) y nos convencerán de que Gameiro es la solución a todos los males. Pero además le darán salida a Aduriz, para seguir haciendo caja, y nos dirán que cuatro delanteros son muchos y que no se puede cerrar el paso a jugadores como Alcacer que vienen apretando, pero nunca veremos a Alcacer sobre el césped.
El dinero no irá para el nuevo estadio.
La estrategia está trazada desde hace meses y se está aplicando en los plazos establecidos. Los medios, como siempre, a los pies del presidente siguen las pautas marcadas y publican al dictado de Lolo lo que a la presidencia le interesa. Mata se marchará, después descubriremos que no fueron 26 millones, que al pagar al contado se redujo la cantidad a 20 kilos y que ese dinero no se invertirá en el nuevo estadio porque hay temas más urgentes que atender. Por ejemplo, pagar los 2 millones de euros en concepto de prima a la plantilla por haber obtenido la tercera posición.
A partir de hoy, las noticias sobre la salida del club de Juan Mata se reproducirán como las esporas, no hay vuelta a trás, el plan Llorente ha echado a rodar. Si todo transcurre conforme al plan, Juanin no seguirá con nosotros y las obras del nuevo estadio seguirán ahí, paradas, para vergüenza del valencianismo.