Rus se reunió con el dueño del City |
Cuando una noticia la confirman los propios protagonistas poco o nada se puede objetar. Alfonso Rus confirmó ayer, en la Cadena Ser, lo que aquí publicamos hace más de un mes, que el dueño del Manchester City, el jeque Sulaiman Al Fahim, visitó su despacho con la intención de hacerse con el Valencia Cf.
En aquel momento se publicó la visita del jeque, sin embargo, los medios apuntaron a que el jeque se había reunido con Fernando Gómez Colomer, que semanas antes había declarado tener un comprador para el club valencianista. Es más, algún medio se atrevió a descalificar a Valencia y che por asegurar que dicha reunión había tenido lugar con Alfonso Rus y no con Fernando Gómez.
El tiempo pone a cada uno en su lugar y ahora se demuestra que, una vez más, en Valencia y che no mentimos y que las informaciones que se publican provienen de fuentes en las que se puede confiar.
Tal y como afirmó Alfonso Rus, en la Cadena Ser, el jeque pidió las cuentas del club y cuando estas estén disponibles se retomarán las negociaciones. Amadeo Salvo ha puesto en marcha un nuevo proyecto pero, tal y como publicamos hace más de un mes, dicho proyecto puede verse truncado a las primeras de cambio si el dueño del City decide invertir en la compra del Valencia Club de Fútbol.
molt bè
ResponderEliminarPues coño, ahora que parece que están haciendo las cosas serias va a venir un jeque a hacer lo que le venga en gana. No se, creo que estos Alfonsos Rus no le hacen ningún bien al Valencia.
ResponderEliminarPues es posible, Ángel. Lo que ocurre con estas cosas es que hasta que no se producen no sabemos si son buenas o no. Después de Roig, la llegada de Soler fue recibida con alegría y mira tu por donde, llevó al club al precipicio. Creo que lo mejor es esperar, contar lo que sucede, apoyar los aciertos y criticar los errores para que no se vuelvan a producir e ir viendo lo que sucede. Yo, si he de ser sincero, soy escéptico tanto con Salvo como con quien venga y compre el club. No confío en nadie y no lo haré hasta que no vea las intenciones de cada cual.
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